¿Qué es el factoring?
Es fundamental que conozcas el concepto para poder comprender su potencialidad. El factoring, o factoraje, es un tipo de recurso por el cual se cede la tarea de cobrar los productos generados de una actividad a un tercero.
El factoring es una herramienta ampliamente aprovechada por empresas de gran tamaño. Sin embargo, las pymes todavía no han descubierto las ventajas de esta vía de financiación.
En la actualidad, el factoring no está regulado de forma específica. Debido a ello, los profesionales que se decantan por este sistema se acogen a la libertad contractual estableciendo una relación delimitada de forma privada.
Ventajas y desventajas del factoring para pymes
Una de las grandes beneficios de este sistema de trabajo es que puedes obtener financiación inmediata. La empresa que cede la factura lo suele hacer a un servicio bancario que adelanta las cantidades a percibir de forma inmediata, por lo que el cobro de las cantidades es muy ventajoso.
El ahorro de tiempo para las pymes también es considerable. No deberías perder de vista en ningún momento que las pequeñas y medianas empresas no suelen contar con departamentos encargados del cobro, por lo que muchos profesionales deben dedicar parte de su jornada laboral a conseguir los cobros deseados.
Por supuesto, también existe algunas desventajas. Por ejemplo, la contratación de servicios asociados como un seguro de pagos puede restar rentabilidad a esta opción de financiación, debido a sus costes elevados.
Igualmente, las empresas financieras pueden llegar a exigir comisiones elevadas, algo que también puede suponer una desventaja y que debe ser tenido en cuenta antes de contratar un servicio de factoring.
En definitiva, el factoring es clave en el departamento de finanzas en una empresa, ya que sus ventajas para las pymes pueden ser decisivas en la estabilidad del negocio.
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