La Responsabilidad Social Corporativa, o RSC, muestra la actitud de una empresa que toma sus decisiones observando no solo la rentabilidad del proyecto, sino también el compromiso responsable en la construcción de un entorno mejor.
Existen distintos campos de implicación social. Uno de los más frecuentes actualmente es la Responsabilidad Social Corporativa que conduce a la práctica de medidas medioambientales que muestran una filosofía ecológica por parte de la organización.
Otras empresas ponen en práctica programas de apoyo al empleo joven por medio de la convocatoria de becas y premios. En otros casos, la empresa pone en marcha iniciativas solidarias para facilitar recursos a un colectivo en riesgo de vulnerabilidad.
Por tanto, la RSC muestra la importancia de la ética en la gestión de un negocio. Responsabilidad Social Corporativa optimista y necesaria. El emprendedor no se centra únicamente en lo económico, sino que la propia empresa se convierte en un vehículo de riqueza para la propia comunidad.
¿Qué beneficios aporta la Responsabilidad Social Corporativa en la organización? Mejora la imagen de marca ante los clientes, ya que el público objetivo valora a una empresa no solo por su catálogo de productos o servicios, sino también por los valores que ofrece. De este modo, los compradores premian el esfuerzo de aquellas empresas que se implican en una causa justa.
Las personas son los activos más importantes de una organización: trabajadores y clientes hacen posible ese proyecto. Por ello, las decisiones que reflejan el compromiso social de la organización producen una mejora en la propia calidad de vida de empleados y público objetivo.
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