Conocer a nuestros clientes es un aspecto clave a tener en cuenta para poder cerrar una venta. En el presente artículo hablaremos de los tipos de clientes que nos podemos encontrar.
Podemos clasificar los tipos de compradores o clientes, básicamente, en 4 grupos diferenciados.
Tipos de clientes
1. Clientes exigentes
Este tipo de cliente, normalmente, es aquel que siempre encuentra defectos al mínimo detalle, con actitudes prepotentes y que siempre piensa que tiene razón. No le gustan las contradicciones.
Para tratar con ellos, debemos tener calma y paciencia y no entrar en conflictos, ya que, como clientes, nos interesará mantenerlos en nuestra cartera.
Estos clientes requieren un interés especial y debemos escuchar sus quejas para darles solución lo antes posible, encajando sus críticas e, incluso, dándoles la razón.
2. Clientes impacientes
Evidentemente, son los clientes que siempre tienen prisa y lo quieren todo ya: entrar, comprar y marcharse.
Estos clientes exigen una atención verdaderamente rápida, ya que pueden mostrar una actitud tensa, si no se les atiende prácticamente de forma inmediata. Incluso, en situaciones excepcionales, habrá que atenderles antes que a otros clientes que hayan llegado primero.
3. Clientes amigables
Amables y simpáticos, son los clientes que toda empresa quiere tener, aunque a veces puedan llegar a ser demasiado habladores y nos robarán más tiempo del que disponemos.
Al igual que ellos, debemos ser amables, pero intentando mantener las distancias, ya que no dejan de ser clientes y no interesa dar pie a una confianza total.
4. Clientes tímidos
Introvertidos y callados, suelen ser inseguros e indecisos. Suelen tener problemas de decisión de compra, por lo que requieren que les demos el tiempo que ellos requieran.
Una buena técnica de venta es ofrecerles productos concretos para facilitar el proceso de compra.
Si necesitas aprender sobre cada técnica de venta, en ESERP tenemos titulaciones que te ayudarán a aprender cómo tratar con tus clientes.