Un ascenso laboral supone, además de un aumento salarial, un mayor número de obligaciones. Por lo tanto, aunque se trate de una mejoría del puesto de trabajo, hay que saber cómo asumir un ascenso, algo que no es tan sencillo como parece. Para enfrentarte a las nuevas responsabilidades, es necesario que estés preparado para afrontar las posibles adversidades que puedan aparecer en tu nuevo puesto de trabajo. Sólo si estás preparado podrás hacer frente a esta situación.
La inteligencia emocional te ayudará a afrontar este nuevo status al que te vas a enfrentar. Si eres una persona emocionalmente inteligente, una persona capaz de desarrollarse y desarrollar, serás capaz de entender al resto de compañeros para que ellos entiendan, a su vez, las necesidades de la empresa.
¿Qué habilidades son necesarias?
La principal habilidad que necesitas para hacer frente a un ascenso, es la empatía. Las personas empáticas son aquellas capaces de entender al resto de compañeros y de ponerse en su situación. Si eres un gran guía para ellos, el resto de trabajadores lo tendrán en cuenta. Contar con un alto grado de empatía te ayudará a descubrir qué es lo que necesitas exigir a tu gente, basándote en sus propias capacidades y limitaciones.
La humildad es otra de las grandes habilidades que debes tener. Un ascenso puede provocar caer en la soberbia, algo que no viene nada bien para mejorar la relación con el resto de trabajadores. Por lo tanto, la humildad es fundamental. No por tener un cargo superior al resto vas a tomar mejores decisiones que los demás empleados. Déjate ayudar por tu entorno.
También necesitarás paciencia, y mucha. Dado que ahora cuentas con un mejor puesto laboral, los errores que puedas cometer también pueden ser mayores. No te desesperes. Si has cometido algún fallo, trata de encontrar nuevas soluciones para revertir la situación. Si no eres paciente, no serás capaz de afrontar los futuros problemas, lo que nos lleva a la cuarta habilidad que necesitas para afrontar tu ascenso: la auto-consciencia.
Es importante evitar tomar decisiones de manera impulsiva. Antes de actuar, piensa bien en las consecuencias que pueden tener tus acciones. Por ello, es imprescindible la paciencia a la hora de tomar una decisión.
La última gran habilidad que debes tener para afrontar tu ascenso laboral, es la motivación. Si eres capaz de estar motivado y, además, de motivar al resto de trabajadores, conseguirás impulsar el desarrollo de cada colaborador. Esto hará que mejores su rendimiento, algo que beneficiará a tu empresa.
Por lo tanto, empatía, humildad, paciencia, determinación y motivación son las cinco habilidades clave para afrontar un ascenso laboral. En ESERP, queremos que llegues lo más lejos posible. Por ello, te ayudamos a que seas un mejor guía tanto para ti mismo, como para el resto de tus trabajadores. ¿Preparado para llegar a lo más alto de la mejor forma?